Reconozco que en ciertos momentos, las novedades que día a día aparecen en la red, me generan cierta ansiedad. Me pregunto cual puede ser la razón de esta sensación y sólo puedo responder con una reflexión de Marshall McLuhan: “La tecnología actúa como extensión de nuestros sentidos”.
Esta imposible sensación de ubicuidad, me impide centrarme en mi trabajo. En aquello que quiero construir, llevar adelante, emprender. Sin embargo, todo llama mi atención, todos pelean por persuadirme, todos quieren seducirme con mil ofertas. Y cada vez me cuesta más, me resulta más difícil seguirle el hilo a mis intereses. No puedo estar en todos los lugares y mucho menos leerlo todo, conocerlo todo, y observo que esta manera de centrarme en mis objetivos me empobrece. Me hace experto y analfabeto a la vez. Especialista de mis tareas, artesano en mi trabajo y desconocedor de todo lo que me rodea. ¿Cómo puedo haber llegado a este punto? ¿Es posible apartarse de esta situación? Definitivamente, no puedo.
Hasta ahora siempre había pensado en la comunicación como un hecho unidireccional con pretensiones formales para la satisfacción de mis necesidades, y no como un ente que puede producir en mí un acentuado cambio cultural. Desconozco hacia donde me lleva esta transformación comunicativa y en qué momento se encuentra, pero sólo será positiva si logro entenderla, si alcanzo una comprensión integral y simultánea que me ayude a situarla.
Como en todos, mi ciclo tiene veinticuatro horas y este entusiasmo por mi proyecto me pide más esfuerzo, más atención, más energía, solo no soy capaz de llevarlo adelante, necesito cooperar, necesito la ayuda de otras personas con el mismo entusiasmo. No puedo seguir trabajando en mi casa rodeado de todo aquello que forma parte de mi vida y sentir que me es ajeno. He conocido en Internet un centro de coworking en el que puedo relacionarme y colaborar con otros emprendedores que también están llevando adelante sus proyectos. Busco un lugar donde compartir un puesto de trabajo y relacionarme con otros profesionales que me enriquezcan con sus aportaciones e ideas.
Si logro integrarme, espero que este cambio sea más fácil; al menos será compartido.